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jueves, 31 de octubre de 2013

NOCHE DE BRUJAS








NO PODRÁS DORMIR PORQUE TENDRÁS ... PESADILLAS.








Las 12 de la noche. La hora de las brujas. La llaman la hora bruja, aunque no sé por qué, pues las brujas son de lo más normal. Están por todas partes, aunque no lo sepamos ni nos demos cuenta. Sin ir más lejos, quién te dice a ti que esa persona, esa mujer que hace un rato te mandó a la cama, te dio un beso, te dijo dulcemente hasta mañana y que será a quien posiblemente veas al despertar, no es una bruja. 
 Quizá, mientras duermes, sale a escondidas de su habitación, se pasea en silencio por la casa, entra donde tú estás durmiendo y te observa detenidamente. ¿Sabes qué pasaría si abrieras los ojos en ese preciso instante en que ella te está mirando?  Nada.   Ella desaparecería instantaneamente. Se haría invisible y todo parecería una impresión, un chispazo de la imaginación, una broma del sueño.
Pero, lleva cuidado, porque una noche al año, las brujas -que pueden ser cualquier mujer, incluidas las  mamás- salen a la oscuridad de la noche, la luna les da una energía especial y fabrican un poder increíble que les permite introducirse en la mente de las personas, sobre todo de los niños.
 Llevad cuidado esta noche. Cuando estéis acostados, poned mucha atención a cualquier sonido, cualquier leve pisada, pues se pueden estar acercando a tu cama, deslizar sus manos esqueléticas por las sábanas, subir hasta donde está tu cara y ...
 ¿Has pensado si algún ser maligno se oculta baja tu cama, esperando el momento adecuado para introducirse en tu mente o en tu cuerpo? ¿Has mirado dentro del armario?  Quizá te está observando desde allí? ¿ Y si se  aparece en mitad de la habitación rodeado de un halo luminíoso como un espectro fantasmal?
 Súbete la sábana hasta las cejas. Mete la cabeza debajo. No respires. Puede estar ahí, ahí , ahí mismo, a tu lado, observándote con ojos golosos y monosémicos. Se puede deslizar sigilosamente y convertirse en serpiente.  ¿Te imaginas una serpiente subiendo por tu cama, arrastrándose despacio, con su lengua bífida y siseante? ¿Te imaginas que se acerca a tu linda carita sonrosada?

Lleva cuidado esta noche.  Y cuando despiertes mañana, si despiertas, mírale bien los ojos a tu madre porque a lo mejor, quizá, tal vez, es posible, pudiera ser ... que no sea quien aparenta ser, que fuera un ser desconocido, tal vez, perverso; tal vez, malvado; tal vez, maligno.    O no.
 Quizá todo sea un sueño, una pesadilla, un trastorno de la mente. Quizá es que sea ...

HALLOWEEEEEEEEEEEEN

Felices sueños.     ¡Ja, ja, ja, ja, ja ...................................!





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